La petrolera obtuvo un crédito de US$ 300 millones estructurado por la CAF que está fondeado mayoritariamente por entidades internacionales. YPF tiene por delante una compleja agenda internacional: los inversores privados esperan una señal para entender qué sucederá con el precio de los combustibles y también siguen de cerca el derrotero de los juicios en Estados Unidos, en especial el de Maxus que involucra un reclamo por US$ 14.000 millones.
La compañía, propiedad de Pampa Energía e YPF, emitió una ON por un valor nominal de US$ 96 millones al 0% para financiar las obras del cierre de ciclo combinado de la central, y mejorar la situación financiera de la compañía.