Como resultado de la devaluación, el complejo refinador, liderado por YPF, pierde a razón de 95 dólares por cada m3 que refina. La depreciación del tipo de cambio no hizo más que acentuar el atraso de los combustibles, que ya cuestan un 40% menos que las naftas importadas. Las refinadores propusieron recuperar en dos tandas el efecto de la devaluación sobre los costos.