La demanda total de gas creció 5,6% interanual en mayo y la de las distribuidoras 15,1%. El incremento se explica fundamentalmente por el frío. Lo preocupante es que esa mayor demanda coincide con el fuerte incremento que registraron las tarifas a partir de abril. Por lo tanto, las boletas que están empezando a llegar contemplan una combinación explosiva que se está repitiendo ahora en julio de la mano de la ola polar.