El sector energético argentino, en especial el de la exploración y explotación de petróleo y gas en toda la zona de Vaca Muerta, viene experimentando un crecimiento sostenido que, de acuerdo con todos los pronósticos, se profundizará en los próximos años. El contexto internacional, la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner y la llegada de inversiones generan un ecosistema dinámico que demanda cada vez más bienes y servicios por parte de las grandes empresas. Frente al crecimiento y la alta inflación, el anticipo de cobro a través de la comercialización de facturas de crédito electrónica en una plataforma multibancos, es la opción que cada vez más Pymes están eligiendo.
Satisfacer ese nivel de demanda implica un desarrollo sostenido de la cadena de valor del sector, es decir, de las más de 2000 Pymes locales proveedoras de las grandes empresas de energía. La necesidad de proveer mayor infraestructura, logística, capacitación y bienes deberá estar acompañada de modernos instrumentos de financiamiento para el sector.
Los beneficios de la FCE
Las facturas de crédito electrónicas emitidas por las Pymes pueden ser negociadas como cualquier activo financiero en plataformas digitales que conectan a las pequeñas y medianas empresas con los bancos, quienes pujan por comprar esa factura con distintas propuestas de descuentos.
En base a esto, Pablo Sanucci, CEO y fundador de Invoitrade, plataforma líder en el mercado, explicó que “la FCE es sin duda una herramienta que empodera a las Pymes, porque los bancos van a pujar para comprar sus facturas, con tasas competitivas y visibles para todos”. “La factura de crédito electrónica y plataformas como la nuestra vienen a cambiar el paradigma del financiamiento Pyme en la Argentina, ya que hoy con sólo tener una cuenta en Invoitrade y subir la FCE a la plataforma, más de 10 bancos estarán ofreciendo efectivo al instante, sin riesgos a futuro y de manera transparente”, detalló Sanucci.
El gran beneficio de esta operación es que las Pymes pueden financiarse de manera transparente, dentro del sistema financiero y sin generar ningún tipo de deuda, a diferencia del sistema de endoso de cheques. Es decir, al no haber endoso en un cheque, la Pyme no asume ningún riesgo vinculado a la factura que negocia, logrando un financiamiento inmediato y sin riesgos.
Por otra parte, en Invoitrade los bancos y las empresas son puestos en pie de igualdad, ya que las entidades financieras no pueden discriminar las operaciones por el tamaño de la compañía oferente.
“Cuando una gran empresa acepta una factura de crédito electrónica, está fortaleciendo su cadena de valor. Porque le da la opción a su proveedor Pyme de, si lo desea o necesita, anticipar el cobro de esa factura dentro del sistema financiero y al instante. Sabemos que es un instrumento que está creciendo (en 2022 se descontaron más 43 mil millones de FCE mediante fintech y para 2023 se espera que el monto ascienda a 120.000 millones de pesos) y que va a sostener gran parte del crecimiento de las Pymes”, indicó Sanucci.
Se estima que 220 mil Pymes emiten mensualmente un volumen superior al billón de pesos en facturas. La FCE es un instrumento financiero oficial no demasiado popularizado hasta el momento, pero asociado a plataformas de acceso seguro y simple, iniciarán un nuevo camino en el mundo del financiamiento de la pequeña y mediana empresa argentina.
¿Qué es el Régimen de Factura de Crédito Electrónica MiPymes?
Es una herramienta que permite impulsar el financiamiento de capital de trabajo y mejorar la certeza de cobro para las MiPymes proveedoras de grandes empresas.
¿Cuándo es obligatorio emitir factura de crédito electrónica?
Es obligatorio para la MiPyME que facture a una Empresa Grande por una operación de compraventa de bienes, locación de cosas muebles, servicios u obra y el monto total sea superior o igual a $ 546.737.