MENDOZA (Enviada especial) .– Michael Meding, presidente del Grupo de Empresas Mineras Exploradoras de la República Argentina (Gemera) y gerente general del megaproyecto de cobre Los Azules, aseguró que la minería argentina atraviesa una oportunidad única. “La Argentina está en un momento histórico que debe aprovechar porque con el gobierno actual no hay problema, pero antes no sabías si te iban a dejar importar. Los argentinos tenemos que empezar a invertir en los desarrollos mineros así las cosas funcionan”, aseveró en la nueva edición de Argentina Mining Cuyo que se desarrolló en Mendoza.
El directivo remarcó que en los últimos años la percepción internacional sobre el país cambió. “Hace dos años me decían que Los Azules era un gran proyecto, pero el problema era que estaba en la Argentina. Hoy me preguntan qué está pasando en la Argentina. El mundo cambió. Después de las turbulencias, el secretario de Estado de Estados Unidos dijo que van a hacer todo lo posible para ayudar al país. Esto nunca lo vi antes. Necesitamos abastecer al mundo y crear condiciones para mejorar la vida de los argentinos”, sostuvo.

Demanda global de cobre
El ejecutivo señaló que la demanda global de cobre está en plena expansión. En la actualidad el mundo consume alrededor de 28 millones de toneladas y se espera que la cifra ascienda a 49 millones en 2035 y a 53 millones en 2050. “El cobre es clave para la urbanización, el transporte, la electromovilidad y la Inteligencia Artificial. El reciente anuncio de OpenAI para instalar 100 MW de procesamiento computacional en la Patagonia será importante para la minería, sobre todo para el cobre”, explicó.
Meding recordó que la Argentina hoy no produce cobre, sino que importa unas 25.000 toneladas anuales, pese a contar con cinco proyectos de clase mundial. “Son proyectos que están dentro del top 10 global y que se pueden desarrollar en plazos relativamente cortos, de unos diez años”, auguró.
Incentivos
Meding planteó que para aprovechar ese contexto es necesario construir condiciones de desarrollo sostenido: “Necesitamos incentivos, algo similar al RIGI, pero aplicado a la exploración. También una política de Estado que impulse corredores energéticos, viales y portuarios, y una red de proveedores locales competitiva en escala y calidad”.

Además, hizo hincapié en la formación de capital humano y en la licencia social como pilares de la sostenibilidad: “Debemos tener siempre un diálogo constructivo y garantizar que las comunidades perciban beneficios concretos. La colaboración con provincias y comunidades es la única vía para el éxito. Debemos generar transparencia y evitar repetir errores, porque eso puede costarnos muy caro. Cuando uno trabaja bien, la gente apoya el desarrollo”.
								
															

