El CEO de Phoenix Global Resources, Pablo Bizzotto, aseguró que “la consistencia es el primer paso para mejorar la competitividad en Vaca Muerta”. “Hoy nos cuesta hacer dentro de un mismo pad dos pozos iguales. La confiabilidad que tienen los sistemas y las herramientas se ha visto degradada en el último tiempo. Creo que ese es el trabajo más importante que tenemos que lograr con los contratistas”, aseguró al inaugurar una nueva edición del Supplier Day, organizado por EconoJournal en el Club Hípico.
Bizzotto reconoció que la macroeconomía es otro aspecto central para mejorar la competitividad, pero es un tema que va más allá del accionar de las compañías petroleras. “El riesgo país, la tasa y el cepo son temas clave para Vaca Muerta, pero no están bajo nuestro control”, subrayó. Por ese motivo, decidió poner el foco en la consistencia, un aspecto que sí depende de la gestión que lleve adelante cada petrolera junto con su red de proveedores.
Crecer orgánicamente
“Para empezar a ser eficiente hay que empezar por casa. Antes de exigirle a los contratistas y a los proveedores nosotros tenemos que dar el ejemplo”, sostuvo Bizzotto, quien aseguró que Phoenix es una empresa de unos 100 empleados que produce cerca de 20.000 barriles diarios, que tiene un plan para llegar a 50.000 barriles en los próximos 2 o 3 años y remarcó que en ese momento seguramente van a ser una compañía de 130 o 140 personas, no 1000 personas. “Tenemos una visión clara para crecer orgánicamente y de manera responsable. No queremos crecer para después volver a ajustar y creemos que es un buen ejemplo para el trabajo con nuestros contratistas”, dijo.
“Nosotros vamos a invertir US$ 2000 millones en los próximos 5 años en el escenario de mínima. Ya tenemos la decisión tomada y el plan lanzado. En un momento en el que muchas compañías están bajando la actividad, incorporamos un segundo rig para acelerar el ingreso de pozos antes de fin de año y en enero incorporamos otro equipo de HP y tenemos un contrato de 5 años por esos dos equipos con la posibilidad de incorporar un tercero en 2027”, aseguró.

Relación con los proveedores
Luego de detallar algunos aspectos clave del plan de Phoenix, Bizzotto analizó la relación con contratistas y proveedores subrayando la necesidad de mejorar la consistencia. “Hoy nos cuesta hacer dentro de un mismo pad dos pozos iguales. La confiabilidad que tienen los sistemas y las herramientas se ha visto degradada en el último tiempo. Creo que ese es el trabajo más importante que tenemos que lograr con los contratistas”, dijo. “Recordemos que el no convencional es una fábrica de pozos. Si nosotros cada pozo lo hacemos distinto, o un pozo demora 30 días y otro 25 esa fábrica no es tan eficiente”, agregó.
“Muchos de los problemas asociados a la consistencia se deben a errores de operación. Si Vaca Muerta va a dar el nuevo salto de actividad, va a haber que poner mucho foco por parte nuestra y de los contratistas para formar la gente para que opere esa tecnología adecuada sin cometer errores”, insistió Bizzotto.
—¿Cómo se prepara a una petrolera para ser más reactiva? –le preguntó Nicolás Gandini, director de EconoJournal.
–Hay que separar la organización propia, que es la que estudia y planifica, que no es la que más cambios sufre, y otra estrategia y foco es la de los contratistas. Por cómo fue nuestro nacimiento, que necesitaba apoyo de los contratistas, hicimos un pacto inicial: aquellos que nos acompañaban desde un principio son los que iban a seguir cuando estuviera el crecimiento. Hicimos muchas alianzas con proveedores locales. Nosotros tenemos un porcentaje muy grande de nuestra cartera de proveedores que son locales, que tienen capacidad de reacción rápida, disponibilidad y manejo muy bueno de los stakeolders y evitar conflictos y problemas en el campo.

Insumo clave
Al analizar estrategias para reducir costos, Bizzotto remarcó la necesidad de acceder a arena a precios competitivos. “La industria no se puede dar el lujo de no tener arena in basin, el negocio no está ni en un tren ni en el transporte, el negocio está en encontrar arena barata, de manera sustentable, producirla con consistencia todos los días del año. Nosotros no podemos pagar arena más última milla a US$ 130 o US$ 150. Eso es una locura”, dijo.
–Hay empresas que prefieren traer arena de Entre Ríos y otras compañías gestionan insumos en cuenca porque en términos de productividad les rinde trabajar con arena más cercana al yacimiento. –le comentó Gandini.
–La variable que hay que mirar es el costo de desarrollo, los dólares que se invierten para construir un pozo versus la EUR (NdE: «Estimated Ultimate Recovery», o en español «Recuperación Final Estimada») que va a tener un pozo. Hoy no hay ninguna evidencia de que la arena de Río Negro haya deteriorado la productividad de los pozos y si la productividad se ve deteriorada dentro de 25 años en la evaluación económica no tiene ningún impacto.