El primer proyecto comercial de transporte y captura de dióxido de carbono transfronterizo del mundo entró en operación en Europa. Se trata de Northern Lights, una joint venture conjunta entre TotalEnergies, Equinor y Shell que busca almacenar en Noruega emisiones originadas en actividades industriales.
Las petroleras informaron esta semana que Northern Lights concretó con éxito la primera inyección de CO2. «Hemos alcanzado un hito emocionante: hemos inyectado y almacenado el primer CO2 de forma segura en el yacimiento. Nuestros barcos, instalaciones y pozos ya están en funcionamiento, afirmó Tim Heijn, director general de Northern Lights JV.
Los primeros volúmenes de dióxido de carbono se transportaron por barco desde la fábrica de cemento de Heidelberg Materials en Brevik, Noruega, hasta las instalaciones de la empresa en Øygarden.
El CO2 fue inyectado a 2600 metros de profundidad en las instalaciones de almacenamiento, a 100 km de la costa oeste de Noruega.

Northern Lights
Northern Lights es propiedad en partes iguales entre Equinor, Shell y TotalEnergies. Equinor, como proveedor de servicios técnicos, ha sido responsable de la construcción de las instalaciones de Øygarden y de las instalaciones marinas y también será responsable de la operación de la planta de CO2.
Con la inyección del primer CO2 se completa la primera fase del desarrollo, que tiene una capacidad total de 1,5 millones de toneladas de CO2 al año. La capacidad de esta fase está completamente reservada.
Las petroleras tomaron en marzo una decisión final de inversión para la segunda fase del desarrollo, que aumentará la capacidad de transporte y almacenamiento a un mínimo de 5 millones de toneladas de CO2 por año.
«Con el CO2 almacenado de forma segura bajo el lecho marino, marcamos un hito importante. Esto demuestra la viabilidad de la captura, el transporte y el almacenamiento de carbono como una industria escalable. Con el apoyo del gobierno noruego y en estrecha colaboración con nuestros socios, hemos transformado con éxito este proyecto de un concepto a una realidad», dijo Anders Opedal, director ejecutivo de Equinor.
Proyecto Longship
La joint venture se encarga del desarrollo y la operación de instalaciones de transporte y almacenamiento de CO2, abiertas a terceros, como parte de Longship, el proyecto integral de captura y almacenamiento de carbono del gobierno noruego.
Se trata de la primera red transfronteriza de infraestructura de transporte y almacenamiento de CO2 «open source», que ofrece a empresas de toda Europa la oportunidad de almacenar su CO2 de forma segura y permanente bajo tierra.
El proyecto Longship incluye la captura de CO2 de fuentes industriales en la región de los fiordos de Oslo (cemento y conversión de residuos en energía) y el transporte de CO2 líquido desde estos puntos de captura industrial hasta una terminal terrestre en la costa oeste de Noruega.
Desde allí, el CO2 licuado se transportará por oleoducto a un lugar de almacenamiento submarino en alta mar en el Mar del Norte, para su almacenamiento permanente.