Luego de que EconoJournal publicara la semana pasada la lista de los grandes anuncios energéticos que quedaron en la nada durante los últimos 20 años e incluyera la inversión de US$ 8400 millones en una planta de hidrógeno verde que prometió Fortescue en noviembre de 2021, la firma australiana salió a aclarar a través de un comunicado que podría desarrollar el proyecto «cuando las condiciones macroeconómicas sean estables».
La firma continúa trabajando en el país y se encuentra realizando en Río Negro estudios de impacto ambiental e ingeniería que incluyen la instalación de mástiles de medición de vientos para el desarrollo del Parque Eólico Cerro Policía en Río Negro, aunque esta vez sin dar plazos ni montos de inversión.
“La energía que produzca Cerro Policía alimentará en un futuro a la planta de hidrógeno verde que se desarrollaría cuando las condiciones macroeconómicas sean estables. Desde Fortescue celebramos la aprobación de la Ley de Bases y del RIGI. Fortescue está a la espera de la reglamentación de la Ley para evaluar los próximos pasos”, aseguró la compañía en referencia al anuncio de 2021 que preveía la construcción de una planta de producción de hidrógeno y un parque eólico en los alrededores de Sierra Grande. Además, estaba previsto montar un puerto en las cercanías de la localidad rionegrina de Punta Colorada.
“Si bien Fortescue anunció inicialmente el proyecto más grande en el país de hidrógeno verde, siempre aclaró que la inversión estaba vinculada a las condiciones macro y a la reglamentación para el sector. Seguimos apostando por la Argentina a la espera de esas condiciones. Por lo pronto, ha comenzado por el parque eólico ya mencionado”, agregó la compañía a modo de descargo.
En noviembre del año pasado, el empresario Andrew Forrest, presidente de Fortescue, fue recibido por el presidente brasileño Lula Da Silva y anunció una inversión de US$ 5000 millones para la construcción de una planta que producirá hidrógeno verde en el complejo portuario de Pecém, en la zona metropolitana de Fortaleza, Brasil. Algunos analistas sostienen que esa planta es la que tenía previsto montar en Argentina. Sin embargo, Fortescue remarcó que “la Argentina tiene todo el potencial para realizar proyectos de gran envergadura que puedan contribuir con la innovación y la descarbonización del mundo, un propósito clave para la compañía”.