Este lunes 13 de marzo se registró la mayor demanda de energía de la historia del país. A las 15.28 se alcanzó los 29.105 megawatts (MW), según información de Cammesa, la compañía que administra el mercado eléctrico mayorista. El alto consumo se dio en medio de una ola de calor con temperaturas cercanas a los 40 grados. Para cubrir el pico, el parque de generación local al máximo no pudo abastecer la demanda y el país tuvo que importar energía de Brasil, Uruguay, Bolivia y Paraguay.
Según señalaron a EconoJournal fuentes del sector de generación, en la provincia de Corrientes hubo un riesgo de desenganche de líneas provenientes de la Central Hidroeléctrica de Yacyretá, a raíz de un incendio registrado cerca de torres de alta tensión, en un fenómeno que se torna cada vez más usual por la sequía y la quema de pastizales en el campo para resembrar.
Generación propia
El parque de generación local estuvo exigido toda la tarde de ayer. Del total de 26.664 MW, las usinas térmicas aportaron 16.886 MW. Luego, las centrales hidroeléctricas como Yacyretá, Salto Grande y Río Grande generaron 6.635 MW en el horario pico. La generación hidroeléctrica tuvo 1.068 MW indisponibles. Otro sector del parque de generación que sumó lo máximo disponible fue el de las energías renovables, que llegó a 2.142 MW. Por su parte, las centrales nucleares de Embalse y Atucha I generaron 1.001 MW, ya que Atucha II (750 MW) por el momento no está operativa.
Argentina utilizó toda la capacidad de generación que tenía disponible, incluido 2.095 MW de las reservas (máquinas térmicas paradas y menos eficientes que entran en operación si se las requiere). De todos modos, no le alcanzó para cubrir el pico de demanda. Por eso tuvo que importar energía. En total, la región aportó 2.441 MW. Desde Brasil se importaron 1.866 MW. El dato no es menor, ya que fue una suerte climatológica que Brasil tenga esta cantidad de energía disponible para enviar a la Argentina. Además, desde Uruguay ingresaron 492 MW, Bolivia sumó 55 MW y Paraguay hizo lo propio con 28 MW. Juntos, los países limítrofes aportaron más energía al sistema que toda la generación renovable de la Argentina.
Las importaciones y exportaciones en la región se negocian según los excedentes de electricidad de cada país. El precio varía según el escalón de potencia y en qué horario de cada día se concretan. La semana pasada el precio de importación de Brasil se ubicó cerca de los 45 dólares por megawatt por hora (US$/MWh), según una fuente consultada por EconoJournal, aunque admitió que esta semana el precio podría estar cerca de los 60 US$/MWh.
Reservas e indisponibles
Las reservas en realidad son máquinas térmicas menos eficientes que no tienen prioridad para despacharse. El ingreso de la energía mayorista al sistema tiene distintas prioridades. Por ejemplo, las fuentes renovables entran primero y las usinas térmicas se van despachando de acuerdo con la eficiencia, por eso las máquinas más modernas lo hacen antes. Según especialistas, un buen sistema eléctrico de un país debería tener reservas de alrededor del 40%. Siguiendo este parámetro, el parque de generación de la Argentina debería poder despachar 35.000 MW, cuando ayer llegó a un tope de 26.664 MW.
Por otra parte, el parque térmico tiene en la actualidad 7.448 MW indisponibles. No se pueden utilizar. Buena parte de estas usinas tienen máquinas de elevada antigüedad y altamente ineficientes cuya reactivación requiere una inversión que no se repaga por el escaso despacho que tendrían los equipos. Según datos de Cammesa, el parque de generación tiene en la actualidad máquinas indisponibles turbovapor (TV) por 3.115 MW; turbogas (TG), por 2.738 MW; ciclos combinados, por 782 MW; y motores diesel (DI), por 813 MW.
Récord y cortes
El récord de 29.105 MW de demanda de energía superó a los 28.562 MW del viernes pasado que, a su vez, había superado el anterior récord de 28.283 MW del 6 de diciembre de 2022. El Gran Buenos Aires alcanzó un nuevo máximo de 11.217 MW a las 15.25, superando el del pasado viernes de 11.151 MW. En medio de la ola de calor, las distribuidoras Edesur y Edenor tuvieron serios problemas con interrupciones del servicio. Cerca de las 19 de este lunes el ENRE informaba que había más de 130.000 hogares residenciales sin luz, la mayoría de Edesur.
Fuentes con conocimiento del segmento de distribución indicaron a EconoJournal que en esta ola de calor -que lleva dos semanas- por encima de los 30° C, cada grado centígrado que sube la temperatura se quedan sin electricidad entre 6.000 y 7.000 usuarios. Este fue un comportamiento constante que se registró durante estos 15 días de temperaturas extremas.