La cumbre de los países del G7 finalizó en Alemania con un llamado a sostener las inversiones públicas en gas natural y de LNG en particular para reducir la dependencia energética con Rusia. El grupo enfatizó en el comunicado final su compromiso con el cumplimiento del Acuerdo de París y con la eliminación de los subsidios y fondos para los combustibles fósiles. También llamó a los países productores de petróleo a incrementar su producción para aliviar las tensiones en el mercado global.
El comunicado oficial de la cumbre refleja la preocupación que existe en materia de seguridad energética y alimentaria global a raíz de la guerra en Ucrania. Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Japón reafirmaron su respaldo al gobierno ucraniano frente a las hostilidades de Rusia y resaltaron los esfuerzos que están realizando para contrarrestar las consecuencias de la guerra en los mercados mundiales. También destacaron la participación de los líderes de Argentina, la India, Indonesia, Senegal y Sudáfrica en la cumbre, con quienes comparten el compromiso de “proteger y fortalecer nuestras democracias” e incrementar la cooperación para atender a los desafíos globales.
El abastecimiento energético es el desafío más relevante y urgente. Si bien el comunicado deja en claro desde un primer momento el compromiso de las potencias con el cumplimiento de las metas de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) contempladas en el Acuerdo de París, también destaca que es necesario dar una respuesta inmediata a los problemas de abastecimiento energético.
“Mientras tomamos medidas inmediatas para asegurar el suministro de energía y detener los aumentos en los precios de la energía impulsados por condiciones extraordinarias del mercado, no comprometeremos nuestros objetivos climáticos y de biodiversidad, incluida la transición energética, ni nuestros compromisos para eliminar gradualmente nuestra dependencia de la energía rusa, incluso mediante la eliminación gradual o la prohibición de la importación de carbón y petróleo rusos”, dice el comunicado oficial.
En ese sentido, el grupo exhortó a los países productores de petróleo alineados o no dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a incrementar su producción para garantizar el abastecimiento mundial “de corto plazo”. “Alentamos a los países productores a aumentar su producción para disminuir la tensión en los mercados energéticos y, en este contexto, damos la bienvenida a las recientes respuestas de la OPEP frente al endurecimiento en los mercados internacionales. Les exhortamos a que continúen actuando en este sentido”, señalaron.
Financiamiento público para gas y LNG
Las potencias ratificaron su compromiso con la eliminación de los subsidios internos a los hidrocarburos. “Hacemos hincapié en que los subsidios a los combustibles fósiles son incompatibles con los objetivos del Acuerdo de París y reafirmamos nuestro compromiso con la eliminación de los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles para 2025”, afirmaron.
En el caso de la utilización de fondos públicos para financiar proyectos de hidrocarburos en el extranjero, las potencias sostuvieron que no habrá “nuevos apoyos públicos directos para el sector energético internacional de combustibles fósiles para fines de 2022”. No obstante, resaltaron la importancia de sostener las inversiones públicas en proyectos de gas natural y de LNG en particular, siempre que sean consistentes con las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés), es decir, con los planes para la reducción y eliminación de las emisiones de GEI que los países están implementando para cumplir con las metas de París.
“En este contexto y con miras a acelerar la eliminación de nuestra dependencia de la energía rusa, destacamos el importante papel que puede desempeñar el aumento de las entregas de LNG, y reconocemos que la inversión en este sector es necesaria en respuesta a la crisis actual. En estas circunstancias excepcionales, la inversión con apoyo público en el sector del gas puede ser apropiada como respuesta temporal, sujeta a circunstancias nacionales claramente definidas, y si se implementa de manera coherente con nuestros objetivos climáticos y sin crear efectos de bloqueo, por ejemplo, asegurando que los proyectos se integren en las estrategias nacionales para el desarrollo de hidrógeno bajo en carbono y renovable”, explica el comunicado.
Sin acuerdo sobre un precio máximo al crudo ruso
Las sanciones económicas contra Rusia también formaron parte de las negociaciones en la cumbre llevada a cabo en Elmau, Alemania. Los embargos dispuestos sobre la importación de petróleo y combustibles rusos no tuvieron hasta ahora el efecto deseado. Rusia continúa exportando crudo a precios altos, al punto tal de que representan casi la mitad de los ingresos que obtiene por sus exportaciones de energía. En cambio, Estados Unidos y Europa han visto incrementos considerables en los precios de los combustibles.
Para disminuir esa fuente de ingresos, Estados Unidos llevó a la cumbre una propuesta para acordar un precio máximo sobre el petróleo que compran a Rusia. Sería una forma de forzar colectivamente a Rusia a vender a un precio menor, a cambio de flexibilizar las medidas que dificultan el comercio de crudo ruso. El objetivo es sumar a este acuerdo a la mayor cantidad posible de países para que sea mucho más efectivo.
“En cuanto al petróleo, consideraremos una variedad de enfoques, incluidas opciones para un posible prohibición completa de todos los servicios que permiten el transporte marítimo de petróleo crudo y productos derivados del petróleo rusos a nivel mundial, a menos que el petróleo se compre a un precio o por debajo de él que se acuerde en consulta con socios internacionales. Al considerar esta y otras opciones, también consideraremos mecanismos de mitigación junto con nuestras medidas restrictivas para garantizar que los países más vulnerables e impactados mantengan el acceso a los mercados energéticos, incluso desde Rusia”, explica el comunicado.
Los líderes del G7 no llegaron a un acuerdo sobre el tema pero se comprometieron a continuar con las conversaciones. “Encomendamos a nuestros ministros pertinentes que continúen discutiendo estas medidas con urgencia, a consultar con terceros países y las partes interesadas que son claves en el sector privado, así como con nuevos proveedores de energía alternativos a los hidrocarburos rusos”, dijeron.
«Esta es una idea muy ambiciosa y con visión de futuro. Tendremos que investigar esto más a fondo y resolverlo antes de responder cualquier otra pregunta», respondió el canciller de Alemania, Olaf Scholz, consultado sobre el tema.
¿Sin capacidad ociosa de producción?
Durante la jornada del lunes, los medios se hicieron eco de una conversación entre el presidente francés Emmanuel Macron y el presidente estadounidense Joe Biden. El presidente francés pareció sugerirle a su par estadounidense que Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita se están quedando sin capacidad ociosa para incrementar la producción de petróleo.
«Tuve una llamada con MbZ», se escuchó a Macron decirle al presidente de los Estados Unidos, en referencia al jeque de los Emiratos Árabes Unidos, Mohammed bin Zayed al-Nahyan. “Me dijo dos cosas. Estoy al máximo, al máximo (de la capacidad de producción). Esto es lo que dice”, dijo Macron. “Y luego dijo que (los) saudíes pueden aumentar en 150 (mil barriles por día). Tal vez un poco más, pero no tienen una gran capacidad antes de los seis meses”, añadió.
El comentario de Macron volvió a encender las discusiones sobre la capacidad ociosa de producción realmente disponible en dichos países. Los precios internacionales del crudo reaccionaron levemente al alza en la jornada del lunes.
In light of recent media reports, I would like to clarify that the UAE is producing near to our maximum production capacity based on its current OPEC+ production baseline (3,168 mbopd) which UAE is committed by until the end of the agreement.
— سهيل المزروعي (@HESuhail) June 27, 2022
Desde EUA enfriaron la idea de que el país no cuenta con capacidad ociosa y respondieron que la producción actual de crudo esta en línea con la meta de producción acordada a nivel de la OPEP+. “A la luz de los reportes recientes de los medios, me gustaría aclarar que los EAU están produciendo cerca de nuestra capacidad máxima de producción en función de su línea de producción actual de la OPEP+ (3168 mbpd), con la que los EAU están comprometidos hasta el final del acuerdo”, dijo el ministro de Energía e Infraestructura, Mohamed Al Mazrouei.
Inversiones
Por otro lado, el G7 anunció un programa global para movilizar en los próximos cinco años fondos privados y públicos por 600.000 millones de dólares en inversiones en países de ingresos medios y bajos, en áreas como energía, salud, ciberseguridad y digitalización, entre otras.
“Sobre la base de nuestros compromisos en Carbis Bay, hemos moldeado e implementado aún más nuestra Asociación para la Infraestructura y la Inversión Globales (PGII), como una oferta conjunta para reducir la brecha de inversión en infraestructura sostenible, inclusiva, resiliente al clima y de calidad en los mercados emergentes y países en desarrollo”, señala el comunicado.
Biden anunció el programa el domingo y ratificó que Estados Unidos aportará 200 de los US$ 600.000 millones comprometidos. El presidente estadounidense mencionó una serie de proyectos que formar parte de este programa. En la lista mencionó los fondos por US$ 14 millones que Estados Unidos destinará para el estudio de factibilidad de construcción de una central con reactores nucleares modulares de la empresa estadounidense NuScale en Rumania.
Las potencias dijeron en el comunicado que apoyarán el despliegue de más energías renovables y del hidrógeno verde. También destacaron que la energía nuclear tiene un rol que jugar en la descarbonización de la matriz energética. “Vamos a aumentar la electricidad generada por energías renovables, así como el uso de renovables en todos los sectores, y nos comprometemos a eliminar las barreras y obstáculos que actualmente dificultan o ralentizan la expansión de las energías renovables y la reducción del consumo de energía. Los países que optan por utilizar la energía nuclear reafirman su papel en su mix energético. Esos países reconocen su potencial para proporcionar energía baja en carbono asequible y contribuir a la seguridad del suministro energético como fuente de energía de base y de flexibilidad en la red. Ellos declaran su evaluación de que el desarrollo y despliegue de tecnologías nucleares avanzadas, incluyendo pequeños reactores modulares en la próxima década, probablemente contribuirá a que más países en todo el mundo adopten la energía nuclear como parte de su combinación energética”, señalaron.