Por Jeff Stein, Will Englund, Steven Mufson y Robert Costa *
La Casa Blanca está considerando impulsar la asistencia federal para los productores de petróleo y gas natural afectados por la caída de los precios del petróleo en medio del brote de coronavirus, ya que funcionarios de la industria cercanos a la administración claman por asistencia, según cuatro personas familiarizadas con las negociaciones internas.
El presidente Trump ha promocionado el crecimiento de la producción de petróleo y gas natural bajo su administración, celebrando su ascenso en Estados decisivos políticamente cruciales como Pensilvania. Pero muchas empresas de petróleo y gas fueron golpeadas el lunes por la guerra de precios que estalló entre Arabia Saudita y Rusia, lo que redujo los precios del crudo, en lo que fue su mayor caída de un día en casi 30 años.
Los funcionarios de la Casa Blanca están alarmados ante la posibilidad de que numerosas compañías de shale, muchas de ellas con deudas profundas, puedan quedar fuera del negocio si la caída de los precios del petróleo deriva en una crisis prolongada para el sector. Es probable que la asistencia federal tome la forma de préstamos gubernamentales de bajo interés para los shale players, cuyas líneas de crédito a las principales instituciones financieras se han ahogado, dijeron tres fuentes.
Incluso las grandes compañías petroleras están amenazadas por la caída del precio del petróleo. Occidental Petroleum recortó el martes su dividendo a 11 centavos por acción desde 79 centavos y redujo el gasto de capital en un tercio. Los precios del petróleo registraron un repunte parcial el martes después de caer en picada el día anterior.
Trump dijo en una conferencia de prensa el lunes que la administración tratará de proporcionar ayuda a partes de la economía afectadas por el coronavirus, incluyendo las industrias de atención al turismo, cruceros y viajes. Un alto funcionario de la administración sostuvo el martes que la industria del shale probablemente se incluiría para recibir ayuda, pero podría no estar en la parte superior de la lista por asistencia.
Una de las compañías más afectadas fue Continental Resources, fundada por Harold Hamm, un partidario de Trump y asesor del presidente en temas de energía. Perdió más de la mitad de su valor de mercado el lunes, aunque recuperó alrededor del 8 por ciento para el mediodía del martes. El 77 por ciento de la participación personal de Hamm en la compañía perdió 2000 millones de dólares de su valor el lunes.
Hamm dijo que la administración debería considerar «cualquier acción que pueda tomar para proteger y preservar los intereses estadounidenses en este momento de ser injustamente desfavorecidos por cualquier gobierno ya sea Rusia o Arabia Saudita».
«No quiero prescribir lo que el presidente debería o no hacer. Es muy capaz para manejar esta situación «, dijo Hamm, pero agregó que quiere discutir la cantidad de empleos en juego y cómo esta situación podría poner en peligro esos empleos y las economías de los Estados productores y comunidades en todo el país, desde Pensilvania hasta California y desde Texas hasta Dakota del Norte».
Mike Sommers, CEO del American Petroleum Institute, le aseguró a la prensa el lunes que la industria del petróleo y el gas no está buscando un rescate. Anne Bradbury, CEO de AXPC, que representa a los 25 principales productores independientes de petróleo y gas en los Estados Unidos, dijo en un comunicado que los productores de shalen están dispuestos a «trabajar con los líderes de nuestra nación en una solución» que garantice la energía a bajo costo.
*Fragmentos de un artículo publicado en The Washington Post el pasado 10 de marzo de 2020.
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Nadie mejor que Trump para manejar esta situacion…..! es piloto de tormentas…!
y agrego…..don’t mess with Texa’s….!