Después de quedar envuelta en escándalos de corrupción en el marco del Lava Jato, que tiene en vilo a las clases política y empresaria de Brasil, la petrolera Petrobras cosechó una buena noticia. La agencia de calificación de riesgo Moody’s anunció la elevación del rating de la deuda corporativa de la compañía de B2 a B1 y alteró la perspectiva de estable a positiva.
La compañía petrolera, la mayor empresa de Brasil, se encargó de destacar esa mejora a las autoridades bursátiles, entre ellas la Comisión Nacional de Valores (CNV) de la Argentina.
Moody’s señaló en su informe «la mejora continua del perfil de liquidez de Petrobras y de sus indicadores financieros en los últimos trimestres, debido, entre otros factores, a mayor eficiencia de costos y a la nueva política de precios. Estos factores también han contribuido para que la compañía mantuviera el acceso a los mercados de capitales y pudiera refinanciar parte de su deuda».
La agencia también remarcó los avances regulatorios en Brasil, que permiten «mejores retornos en inversiones a largo plazo». Y reconoció el compromiso de la administración de la empresa de alcanzar las metas financieras y operativas establecidas en el Plan de Negocios y Gestión 2017-2021.
Por último, la agencia informó que la perspectiva positiva indica que, en los próximos 18 meses, si la liquidez y el riesgo de crédito de la compañía siguieren mejorando, es posible que hayan nuevos avances en la calificación de Petrobras.