Las temperaturas templadas que se proyectan para los próximos días en la zona centro del país podrían desembocar en una reapertura de las exportaciones de gas a Chile para descomprimir la presión en las cabeceras del sistema de gasoductos troncales. La Secretaría de Energía ya decidió que, los próximos días, buscará redireccionar la oferta excedente de Gas Natural Licuado (LNG, por sus siglas en inglés) hacia centrales termoeléctricas para exportar electricidad hacia Brasil, que atraviesa una de las peores crisis hidroeléctricas de sus historia y está importando energía desde todos los países limítrofes.
Es un buen negocio con la Argentina, incluso habiendo pagado precios del GNL que, en algunos casos, superan los 10 dólares por millón de BTU. El precio de la energía enviada a Brasil oscilaría entre los 130 y los 240 dólares por MWh, según la cantidad de electricidad que adquiera el ONS, el organismo encargado del despacho de Brasil (las propuestas semanales se desagregan en bloques con distintos precios).
En cualquiera de esos casos, para la Argentina la ecuación es conveniente, porque con los dólares que ingresan de Brasil repaga el costo del LNG importado e, incluso, con el margen restante contribuye a limar la abultada cifra de subsidios del Tesoro que recibe el sector. En noviembre de 2020, la Argentina exportó hasta 1600 MW hacia Brasil bajo la misma modalidad.
“Nos está sobrando algo de carbón y LNG, porque el gasoil lo guardamos como reserva. Brasil funciona como una especie de válvula de ajuste cuando nos sobra combustible en el parque de generación, porque podemos colocar en ese mercado la energía excedente en el sistema. Es un buen negocio porque no sólo logramos cubrir los costos del sistema, sino que también conseguimos un margen positivo que reduce algo los subsidios que se destinan a la importación de energía”, explicó a EconoJournal un colaborador de Darío Martínez.
Reapertura hacia Chile
También es probable que el fin de semana se reactiven las exportaciones de gas interrumpible hacia Chile. Con las máximas cerca de los 20º en Buenos Aires para el sábado y el domingo, algunas empresas productoras de gas —un segmento liderado por YPF, Total, PAE, Wintershall Dea, Tecpetrol y CGC— proyectan que habría que exportar entre 2 y 3 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/día) de gas para descomprimir el linepack en el sistema de transporte.
La exportación de hacia el país trasandino evitaría tener que cerrar pozos que están en producción. El importe de venta podría rondar, como tope, el precio previsto en el Plan Gas Ar para invierno. No hay certezas de que se vaya a avanzar en esa dirección, pero algunas petroleras ya empezaron a preparar la documentación aduanera (la pro-forma de exportación puede demorar casi dos días) para estar listos en caso de que la ventana de oportunidad se presente.
“Lo prioritario es la seguridad del abastecimiento. Con el Plan Gas y el barco regasificador de Bahía Blanca logramos sortear relativamente bien un escenario complejo por la fenomenal sequía del Paraná. Sin esas dos herramientas, hubiésemos estado complicados. Iremos viendo con el paso de los días. Si sobra gas en el sistema, una posibilidad es habilitar las exportaciones de gas a Chile para que las petroleras no tengan que cerrar pozos en un contexto económico complicado”, reconoció la misma fuente de la Secretaría de Energía.